Comparto con ustedes lo que escribí hoy a mis colegas de RINACE (
http://www.rinace.net/espanol.htm) Después de varios años en el aula y la investigación educativa y tomando el riesgo de una visión algo simplista, algo parcial, diría que para mejorar la calidad en la educación es importante lo que sucede con profesores y alumnos en la sala de clase como es importante lo que sucede fuera de ella. Es importante contar con maestros bien preparados, especialistas, apasionados, pero que sean también buenos comunicadores, que sepan persuadir, involucrar a sus alumnos, provocar curiosidad y motivar y despertar la automotivación que enseña a aprender; que contagien el gusto por la lectura y la investigación. La declamación es necesaria para informar, el ejemplo está siempre presente para formar hasta involuntariamente, pero también hay que salir del aula, ampliar la visión, formar en hábitos y promover un sistema de valores que permita a nuestros alumnos disfrutar la breve etapa de manera memorable y salir mejor armados de la escuela, ser autosuficientes, independientes y lograr lo que se propongan.
Y hasta aquí sólo hemos hablado de alumno y docente, falta invitar a la mesa a padres de familia y al personal no docente (directivos, autoridades, sindicato), pero para definir los criterios de calidad de manera más completa, más exacta, estoy convencido que hay que mirar los efectos en el largo plazo para encontrar los defectos que generamos; es decir, el resultado de nuestros esfuerzos para educar sólo se ven objetivamente en el tiempo así que hablemos con nuestros exalumnos!!! Ellos son la medida en persona de nuestras contribuciones a la creación de las familias, comunidades, sociedades y países que tenemos.
Espero con gran interés sus comentarios.
